lunes, 2 de abril de 2007

Frases y fragmentos ... (XX)

... de lecturas más o menos recientes.

Chéjov

"El encargado me dijo: 'Le tengo a usted aquí sólo por respeto a su venerable padre; de lo contrario hace mucho tiempo que hubiera usted salido volando.' Yo le dije. 'Me lisonjea usted demasiado, excelencia, al suponer que yo sé volar'. Luego, oí como decía: “Llévense a este señor, me ataca los nervios'."
Mi vida. Antón Chéjov

"Cuando había asistido a los ensayos en Moscú, se había reído de muchos aspectos de la dirección que le habían parecido absurdos. Stanislavski tenía la costumbre de introducir el tictac de relojes, el sonido de timbres y sonajeros, incluso el canto de grillos. Quería que se oyeran los ladridos de perros auténticos para dar la sensación de realidad. Chéjov encontraba absurdos todos esos ruidos. Y lo que más absurdo le parecía eran los ladridos de perros auténticos. Había dicho: 'es como si en la cara de una persona pintada en un cuadro se aplicara una auténtica nariz'."
Antón Chéjov. Natalia Ginzburg

"Cuando Suvórin le insiste en una carta que debe contraer matrimonio, Chéjov le responde:
'De acuerdo, me voy a casar si este es su deseo. Pero éstas son mis condiciones: todo deberá continuar como antes, es decir, ella vivirá en Moscú y yo en el campo, y vendré a verla. No podría soportar la felicidad continua, todos los días, de la mañana a la noche. Si se me habla todos los días de lo mismo y en el mismo tono, me pongo furioso … Prometo ser un marido excelente, pero déme una esposa que sea como la luna, que no aparezca en mi cielo todos los días: el matrimonio no me haría escribir mejor …'"

Semblanza de Antón Pávlovich Chéjov. Victor Andresco

"El 2 de junio de 1904 [con 44 años], Antón Pávlovich Chéjov se despierta súbitamente en su habitación de un hotel de Berlín. Llama a su mujer y le dice que le traiga champagne, luego exclama: 'Ich sterbe' [Me muero]. Con los ojos entornados, pensativo, bebe lentamente su copa de champagne. ¡Es la última de su vida! Después, tranquilamente, se acuesta sobre un lado y muere.
Su cadáver fue trasladado de Badenweiler a San Petersburgo, en un vagón cuyo letrero decía: 'Ostras'. El tren entró muy despacio en la estación casi vacía, donde esperaba un reducido grupo de amigos. Las contadas personas que circulaban por los andenes y los empleados ignoraban que en aquel 'vagón de ostras' acababa de realizar su último viaje –para recibir sepultura en su patria- uno de los más grandes escritores rusos."

Semblanza de Antón Pávlovich Chéjov. Victor Andresco

3 comentarios:

cabelodeanxo dijo...

ansioso ya de que actualices...
desde la última vez hasta ahora...
es visita obligada éste, tu blog.
Me parece realmente fabuloso, maravillo, atractivo poder descubrir pequeños fragmentos de la literatura más grande de todos los tiempos...

Un saludo enorme

noesmivida@hotmail.com dijo...

Te agradezco el comentario ... y, nada, de eso se trata, de compartirlos. Un saludo.

Anónimo dijo...

Excelente blog, he quedado fascinada por las frases y fragmentos , por la seleccion de los autores. Brillante.